http://torahdesdebarranquilla.blogspot.com/
PERASHAT SHELAJ LEJA
(Envía)
Libro Bemidbar / Números (13:1 a 15:41)
Haftara: Yehoshúa/Josué 2: 1-24
Dedicado a la Refua shelema
( curación completa) de:
MARAN HAGAON HARAV YOSEF SHOLOM BEN JAIA MUSHKA ELYASHIV SHLIT"A.
TINOK BEN ILANA HACOHEN
Sr. Alberto Girado Lobo
Sr.Sixto hijo de Juana
Sr. Fabio Camacho
Matitiahu Ben Katerine
Sr.Alfonso Rojas
Avraham Moshe ben Miriam
Sebastián Ben Rujama
Sr.Zevulón ben Alicia
Sr Aaron Ben Sara
David Gabriel Ben Farida
Sr. Soto Forero Hijo de Isabel
SRA.RIVKA BAT SARA IMENU
Sra Aura Ester bat Jana
Sra Maria Bat Lola
Sra Aylin Bat Olga
Sra. Leah Zehara bat Miriam
Sra.Rujama Bat Clemencia
Sra.Rina bat Clemencia
Sra.Clemencia bat Tana
Sra.Mayo Bat Tana
Sra.Etelvina bat Tana
Sra Jaya Bat Shira
Sra Maria Barrerio
Sra Mijal Ruby Bat Marlen
Sra Hanna Bat Malka
Sra. Graciela Arenas
Sra. Mariela Barreiro
Sra. Maria Delgado
Angela Bat Orly
Sra. Aylin Bat Aylin
Sra. Nurys Bat Aylin
Sra Nahomi Bat Maria Teresa
Sra. Nohemi Bar Esther
Leiluy Nishmatam ( Y por la Elevación de las Almas) de:
MARAN HAGON HARAV MORDEJAI TZEMAJ ELIYAHU BEN MAZAL TOV ZT''L
HaRab Jaim David Ben Shraga Fievel Zukervar ZT''L
Harab Amram Horowitz ZT''L
Sr. Martín Lindarte Z''L
Sr. Miguiel Avila Z''L
Sr.Carlos Ben Maria Z''L
Sr. Julio Wasserman Z''L
Iyov Ben Avraham Z''L
Sr. Epifanio Enrique Ben Amada Z''L
Sr. Roberto Ben Blanca Z''L
Sr. Mario Gil Ben Graciela Z''L
Sr. Anibal Ben Clemencia Z''L
Sra. Dora Bat Juana Z''L
Sra. Flor Cortes Bat Sara Z´´L
Sra. Maira Maldonado Z''L
YAFFA BAT SARA Z"L
Asher Amram Ben Avraham
* Si desea dedicar este envio de Torah, por la pronta recuparacion de un familiar o un amigo o en recuerdo del alma de algun ser querido, por favor envienos un correo a comhebrea@gmail.com con el nombre de la persona y el nombre de su Madre.
Fecha | Hora |
Viernes, 17 Junio, 2011 | Encendido de velas a las: 17:51 |
Shabat, 18 Junio, 2011 | Shabat concluye: 18:43 |
Fecha | Hora |
Viernes, 17 Junio, 2011 | Encendido de velas a las: 18:05 |
Shabat, 18 Junio, 2011 | Shabat concluye: 18:58 |
Fecha | Hora |
Viernes, 17 Junio, 2011 | Encendido de velas a las: 17:58 |
Shabat, 18 Junio, 2011 | Shabat concluye: 18:50 |
Es muy importante saber la hora exacta del encendido de velas, ya que bajo ninguna circunstancia esta permitido encenderlas después de la puesta del sol
Resumen de la Perashá
En el comienzo de esta Parashá el Eterno ordenó a Moshé que enviara hombres para explorar la tierra de Canaán, eligiendo un hombre de cada tribu. El Pueblo de Israel se encontraba en Kadesh, en el desierto de Parán, y Moshé, según la orden del Eterno eligió a doce representantes, uno por cada tribu, para explorar la tierra prometida; entre ellos se encontraban Yehoshúa y Caleb. A su regreso, debían informar sobre la tierra vista, sus condiciones, su población, su suelo.
Los emisarios cruzaron el Neguev, al sur de Canaán en dirección al norte, habiendo llegado a Rejov, pasando luego por Hebrón y posteriormente llegaron al valle de Eshkol. Estuvieron ausentes durante cuarenta días, en que regresaron a Kadesh, en el desierto de Parán donde se encontraba el campamento. Trajeron consigo grandes racimos de uvas, granadas e higos.
Cuando se presentaron ante Moshé y Aharón, reconocieron que se trataba de una tierra que mana leche y miel, con grandes frutos. Asimismo observaron grandes ciudades muy fortificadas y relataron que sus habitantes eran muy fuertes y poderosos, y que sería imposible conquistar la tierra de Canaán. De esta manera atemorizaron a los Bnei Israel.
Yehoshúa y Caleb, no compartieron ese informe negativo y aconsejaron que el pueblo continuara su marcha hacia Canaán. No obstante, el pueblo se rebeló y pidieron elegir otro líder que los condujera nuevamente a Egipto. No quisieron oír las palabras de Yehoshúa y Caleb.
El Todopoderoso se encolerizó contra el pueblo por la falta de fe y quiso destruirlo para luego formar otra nación, pero Moshé con sus rezos medió y logró la supervivencia de los Hijos de Israel, aunque fueron condenados a errar por el desierto durante cuarenta años, un año por cada día que los espías estuvieron fuera del campamento. De esta manera a través de ese tiempo morirían todos los mayores de veinte años (salvo Yehoshúa y Caleb) y así entraría a Eretz Israel una nueva generación.
Los diez espías que hablaron desfavorablemente, murieron a causa de una plaga, inmediatamente.
Luego, el pueblo comprendió su error y quiso subir a la tierra prometida, a pesar de que Moshé les advirtió que el Todopoderoso no los acompañaría y una cantidad de sus miembros, obstinadamente, partieron y fueron derrotados por las tribus de Amalek y Canaán.
Hashem ordenó que cuando el pueblo entrara a la Tierra Prometida, debían realizar ciertas ofrendas y cuando comieran pan, deberían apartar una parte de la masa como ofrenda al Eterno. Esto último fue ordenado para todas las generaciones.
Mientras el pueblo permaneció en el desierto, se comprobó que un hombre profanaba el Shabat. Se le retuvo y se consultó al Todopoderoso quien ordenó castigarlo apedreándole hasta morir.
El Eterno dijo a Moshé que promulgara una ley por la que los Hijos de Israel (solo los hombres) debían usar Tzitzit (flecos) en los bordes de sus vestimentas (en las cuatro esquinas), para que el pueblo recordara y cumpliera los mandatos Divinos. Es ley para todas las generaciones del Pueblo de Israel.El fracaso de los exploradores
Ya dijeron los sabios del Talmud: por la senda, por la cual el hombre quiere ir, es conducido. D-s había prometido “Os sacaré de la opresión de Egipto a la tierra de Kenaanita y del Hitita… tierra que emana leche y miel”. . Pero he aquí que los hijos de Israel que ya probaron su falta de fe, y su enfermiza añoranza a la triste realidad de Egipto, aquellos que no estaban satisfechos con el maná y preferían las cebollas y los ajos, las sandías y el puerro prefirieron ser guiados a la tierra prometida por medio de guías y exploradores en vez de apoyarse en la ayuda del Todopoderoso, que ya les había prometido que serían conducidos a Eretz Israel sobre las alas del águila.
Por eso cuando los hebreos vinieron a Moshé y dijeron: “Envíanos hombres delante de nosotros” este se aconsejó con el Santo Espíritu: le dijo (D-s): Ya les dije que la tierra es buena, os juro (Puesto que desconfiasteis)y pedistéis mandar gente para reconocer la tierra y ver si verdaderamente es buena os doy ocasión para equivocaros con las palabras que traerán vuestros enviados, para que no podáis heredar la tierra (Bamidbar 13: Rashi)
Si te parece – dijo D-s a Moshé, envía a los exploradores, Yo no te lo ordeno.
El Todopoderoso concede siempre a los seres humanos la oportunidad de corregir sus acciones, y en forma especial fueron elegidos los mejores hombres como cita el versículo: por mandamiento del Señor todos ellos eran hombres principales de los hijos e Israel (Bamidbar 13:3)
Las preguntas de Moshé y las respuestas de los exploradores
Moshé pidió a los exploradores que investiguen seis puntos, sobre los cuales pidió respuestas claras y concisas.
“Y ve la tierra cual es”
Y el pueblo que habita en ella si es fuerte o débil
si es escaso o numeroso 13:18
Y que la tierra donde habita es buena o mala
Y que tal son las ciudades en que habita
Si vive en campamento o plazas fuertes 13:19
Y que tal es el suelo si es foraz o estéril
Y si allí hay árboles o no 13:20
¿Qué respuesta trajeron los exploradores?
Veamos lo que dicen los versículos. Después de su regreso dijeron: Llegamos a la tierra donde nos enviaste la cuál ciertamente mana leche y miel; y
Este es el fruto de ella 13:27.
Empero es muy fuerte el pueblo que habita en aquella tierra. Y las ciudades están fortificadas y son muy grandes.
También los hijos de Anak (el gigante) Hemos visto allí 13:28 Amelek habita en la tierra del negueo 13:29
Kaleb el hijo de Iefune pronuncia palabras tranquilizadoras:
Subamos de una vez y tomemos posesión de ella porque muy bien podemos conquistarla 13:20
A lo que los espías dicen:
No podremos subir contra esta gente, porque es más fuerte que nosotros 13:21
Y por último se dirigen a todo el pueblo:
Y trajeron los hijos de Israel noticias infamatorias contra la tierra que habían explorado diciendo: La tierra por donde hemos pasado para explorarla, es tierra que consume a sus moradores; y todo el pueblo que vimos en ella, son hombres (de enorme) estatura. 13:32
¿Acaso las respuestas de los exploradores concuerdan con la lista de temas que Moshé les encomendó investigar?
Leamos lo que dice Ramban (Rabí Moshé ben Najman 13:2)
Que hicieron los Meraglim (exploradores) pues Moshé les dijo:“Y ved la tierra que tal es; y el pueblo que habita en ella” y que tal son las ciudades de todos modos debían responderle lo que les fue encomendado.
¿Cuál es entonces su pecado al responder?
Empero es muy fuerte el pueblo que habita en aquella tierra.
¿Acaso los envió con la condición de que mientan?
Pero si prestamos atención a estas palabras diremos que los exploradores no eran objetivos, ya que según ellos todas las cualidades de la Tierra Prometida de nada valdrán, ya que es muy fuerte el pueblo que mora en ella.
Y así explica en su libro “Akedat Itzjak” el Rabino Itzjak Arama.
Por su propia voluntad dejaron de ser espías para convertirse en consejeros, y éste es el motivo por el que pecaron, esto es similar al caso del hombre que dice a su enviado: Ve a la casa del comerciante y observarás allí una túnica que él posee, observarás la calidad de su lana, su ancho, su aspecto y su precio y me informarás ya que deseo comprarla.
Si el hombre volviese dispuesto. La he visto y he aquí que su lana es pura, su tamaño grande, su color es verdoso y rojo, y su costo es de 1.000 zuzim (monedas antiguas) cumplió su misión ateniéndose a ella. Más dice: la he visto y he aquí que es buena y amplia y su lana es buena y pura, pero su precio es elevado. 1.000 monedas, dejo de ser enviado para convertirse en consejero al poner énfasis en la palabra pero
Moshé pidió a los exploradores que investiguen seis puntos, sobre los cuales pidió respuestas claras y concisas.
“Y ve la tierra cual es”
Y el pueblo que habita en ella si es fuerte o débil
si es escaso o numeroso 13:18
Y que la tierra donde habita es buena o mala
Y que tal son las ciudades en que habita
Si vive en campamento o plazas fuertes 13:19
Y que tal es el suelo si es foraz o estéril
Y si allí hay árboles o no 13:20
Veamos lo que dicen los versículos. Después de su regreso dijeron: Llegamos a la tierra donde nos enviaste la cuál ciertamente mana leche y miel; y
Este es el fruto de ella 13:27.
También los hijos de Anak (el gigante) Hemos visto allí 13:28 Amelek habita en la tierra del negueo 13:29
Subamos de una vez y tomemos posesión de ella porque muy bien podemos conquistarla 13:20
No podremos subir contra esta gente, porque es más fuerte que nosotros 13:21
Y trajeron los hijos de Israel noticias infamatorias contra la tierra que habían explorado diciendo: La tierra por donde hemos pasado para explorarla, es tierra que consume a sus moradores; y todo el pueblo que vimos en ella, son hombres (de enorme) estatura. 13:32
Leamos lo que dice Ramban (Rabí Moshé ben Najman 13:2)
Que hicieron los Meraglim (exploradores) pues Moshé les dijo:“Y ved la tierra que tal es; y el pueblo que habita en ella” y que tal son las ciudades de todos modos debían responderle lo que les fue encomendado.
¿Cuál es entonces su pecado al responder?
Empero es muy fuerte el pueblo que habita en aquella tierra.
¿Acaso los envió con la condición de que mientan?
Pero si prestamos atención a estas palabras diremos que los exploradores no eran objetivos, ya que según ellos todas las cualidades de la Tierra Prometida de nada valdrán, ya que es muy fuerte el pueblo que mora en ella.
El Pecado de los Espías
La parashá comienza cuando Dios le dice a Moshé que envíe espías, aparentemente una orden directa. Sin embargo, la Torá no es un libro de historia, y por lo tanto no está necesariamente en orden cronológico. En Deuteronomio 1:22 leemos que el pueblo pidió que se mandaran espías, y Moshé estuvo de acuerdo. También en el libro de Yehoshua (Cap.2), Yehoshua manda dos espías anónimos a Jericó (que llevan su respuesta solamente a Yehoshua).
Pregunta: ¿Dios mismo dio la orden de que se mandaran espías, como está implícito aquí, o fue idea del pueblo?
Segunda pregunta: ¿Por qué mando Moshé a doce personas famosas, que dieron su reporte a toda la nación y no simplemente dos hombres desconocidos como Yehoshua?
* * *
Exploradores y Espías
Nuestra parashá utiliza la palabra “explorar” (latur) que se refiere a la tierra, en vez del término “espiar”. El comentarista Malbim explica la diferencia. Si una nación está considerando invadir a otra, en lo primero que debe fijar su atención es en el elemento positivo de la tierra que desea. ¿Satisface sus necesidades y deseos? Esto es de particular importancia cuando la nación consiste de varias tribus, cada una con su propio interés. Entonces sería lógico enviar representantes de cada tribu para explorar la tierra y dar un reporte de sus bondades a todo el campamento.
Sin embargo, una vez que una nación decide conquistar, tiene que mandar espías para buscar los puntos débiles. Esto es puramente por razones militares y el reporte se entrega solamente al comandante en jefe.
Entonces, vemos que dado que Moshé envío exploradores para inspeccionar lo bueno de la tierra y determinar si eran adecuados sus recursos, él tenía que enviar representantes de cada tribu para que reportaran sus hallazgos a todo el pueblo. Yehoshua, por su parte, envío espías que eran hombres de ejército con un propósito militar, y ellos entregaron el reporte sólo a su líder.
* * *
Causa y Efecto Natural
Los judíos que deambularon 40 años en el desierto vivieron una existencia sobrenatural. Comieron Maná, tuvieron una fuente de agua portátil y sus ropas y zapatos no se gastaban. Esto, sin embargo, no era la meta. Dios creó la naturaleza, y como regla, quiere que vivamos de forma natural. ¡Los años del desierto fueron un “curso rápido” de cómo creer, amar y temer a Dios! Sin embargo, una vez que entramos a la tierra, teníamos que plantar y cosechar como cualquier otra persona.
En Egipto, Dios peleó todas nuestras batallas. Ahora, Moshé les dijo que tenían que desenvainar sus espadas y sus lanzas para ir a la guerra. “Suban para heredar la Tierra Prometida. ¡No teman ni vacilen!” (Deuteronomio 1:21). Esto implica que había algo que temer. El pueblo reaccionó diciendo: “Si debemos pelear una batalla natural, debemos utilizar tácticas militares y enviar exploradores y espías”. Moshé no pudo negarse sin que sospecharan que tenía algo que esconder. (O… “¡Por supuesto que puedes probar mi Cadillac en un camino de tierra!”)
En este momento, se le aparece Dios a Moshé y le informa que si él desea enviar espías (bajo su responsabilidad), los líderes de las tribus son los candidatos que tienen la mayor probabilidad de ser exitosos. Fue la decisión del pueblo, con la aprobación pasiva de Moshé. Dios, sin embargo, eligió a los espías, que eran grandes personas.
* * *
Dilema de Vida
La causa del error de los espías fue que cuando la naturaleza empieza a jugar un rol, tendemos a olvidar que Dios hace que las cosas ocurran.
En la vida, nos enfrentamos constantemente con este dilema. Por otro lado, debemos realizar los esfuerzos naturales necesarios para satisfacer nuestras necesidades. Tomamos remedios, buscamos una esposa y un trabajo, tenemos un ejército y una fuerza aérea para proteger nuestra nación. Y aún así creemos que todo está finalmente en las manos del Creador, sin importar cuánto esfuerzo nosotros pongamos.
El puente entre esta paradoja es el rezo. Tomamos los remedios y rezamos, buscamos un trabajo y rezamos, defendemos nuestro país y rezamos. Sin la ayuda de Dios, nada puede resultar exitoso.
* * *
La Prueba de los Espías
Originalmente los espías tenían buenas intenciones, pero se inmiscuyeron segundas intenciones. Ellos tenían posiciones de liderazgo y les dio miedo que después de entrar en la Tierra de Israel, pudieran perderlas. En algunas ocasiones las segundas intenciones pueden llevar a las personas a racionalizar hasta el punto que pueden engañarse a sí mismas.
Cuando los espías llegaron a la ciudad de Hebrón tuvieron la primera visión de los gigantes. “¡Éramos como saltamontes a nuestros ojos y así nos veían ellos!”. (Números 13:33)
Pregunta: ¿Cómo puede alguien que presenció las Diez Plagas, la apertura del Mar Rojo y la revelación en el Sinai impresionarse tanto con un gigante mortal?
Respuesta: Los espías sabían que ellos estaban viviendo en un estado de elevación espiritual mayor que el de los Canaanitas. Sin embargo, ellos pensaron que si para los Canaanitas, era requisito ser un gigante físicamente para sobrevivir en la tierra, entonces seguramente en un nivel más elevado, ellos debían ser “gigantes espirituales” para poder vivir en la tierra. (Escuchado del Rebe de Klausenberger)
* * *
Calev y Yehoshua
Uno de los espías era Yehoshua. Como discípulo de Moshé, él recibió una bendición especial de su mentor, que estaba consciente de la tremenda prueba que ellos enfrentaban. Por otra parte, Calev, de la tribu de Yehuda, sintió que se debilitaba y que pronto sería intimidado para seguir el plan de los otros espías de dar un mal reporte. Dado que estaban cerca de la ciudad de Hebrón, donde están las tumbas de los Patriarcas y de las Matriarcas, Calev fue solo a rezar en sus tumbas para poder superar la prueba. Ese es el significado del cambio de persona gramatical, “Ellos (plural) subieron al Negev y él (singular) fue a Hebrón” (Números 13:22).
En este punto, los espías decidieron dar un reporte negativo y asustar al pueblo. Eso iba en contra de la esencia de su misión. La definición de su misión era: “Observen la tierra y sus habitantes, vean si son fuertes, o si son débiles, son pocos o son muchos” (Números 13:18). Pero Moshé no dio a entender que eso marcaría una diferencia en si atacábamos o no. La intención de Moshé era decir que no hacía ninguna diferencia si eran fuertes o no, ellos los iban a conquistar de todas maneras.
El propósito de la misión de los espías era tener un reporte de testigos directos de la tierra antes de la entrada de los israelitas, para que las futuras generaciones supieran sobre el milagro que Dios les hizo al permitirles conquistar a esas poderosas naciones de gigantes.
* * *
Frutos de la Tierra
Moshé le dijo a los espías específicamente que trajeran algunas frutas de Israel. Dado que era la época de cosecha de la uva, ellos no provocarían sospechas al estar cargando racimos de uva. La fruta era tan enorme, que era necesario que ocho hombres cargaran un solo racimo de uva, y un hombre para cargar una granada y otro para un higo (cada uno probablemente del tamaño de una sandía). (Números 13:23)
Pregunta: Eso suma 10 espías, ¿qué pasó con los otros dos?
Respuesta: Yehoshua y Calev no tomaron frutas porque se dieron cuenta que el plan de los espías era asustar al pueblo – diciendo por ejemplo “¡Si piensas que la fruta es gigante, sólo espera a ver a las personas!”.
* * *
Argumentación de los Espías
La misión tomó 40 días. A pesar de que los sabios calcularon que el tiempo que se requería para completar la misión era el doble de eso, Dios acortó el camino para que el castigo de “un año por cada día” no fuera tan largo.
Los espías regresaron al desierto y dieron su reporte al pueblo. “[De] la tierra mana leche y miel y esta es su fruta” (Números 13:27). Sobre esto los sabios dicen: “Para que una mentira sea creíble, tiene que contener un poco de verdad”.
Los espías continuaron con su reporte: “¡Sin embargo!, Las personas son gigantes, hombres de gran altura, y la tierra devora a sus habitantes” (Números 13:32). Los espías dijeron que presenciaron constantemente funerales (planeados por Dios para prevenir que los detectaran en su misión). “Para poder vivir en esa tierra, uno debe ser un gigante”. Para la mayoría de la gente eso significa ser un gigante físico; para los judíos, significa ser un “hombre de gran altura espiritual”. (Rebe de Klausenberger)
Los espías comenzaron con un motivo ulterior que los llevó a inventar una filosofía (uno debe ser un gigante espiritual para sobrevivir en Israel) y luego agregaron un poco de verdad extra – Ellos concluyeron que: Como nosotros no estamos en ese nivel espiritual, ¡mejor nos quedamos en el desierto donde somos príncipes!
* * *
Calev fue Más Listo que los Espías
La ley judía afirma que la evidencia más fuerte en una corte es el testimonio de dos testigos. Un solo testigo puede exigir un juramento (de parte del demandado), pero no forzar un pago. Si dos testigos contradicen a uno, le creemos a los dos. Sin embargo, dos testigos y un millón de testigos tienen exactamente el mismo peso y pueden anularse los unos a los otros. Calev le hizo creer a los espías que él estaba de lado de ellos, mientras que ellos asumían que Yehoshua estaba de parte de Moshé. Eso significaba que eran 11 contra 1 a su favor. Por lo tanto, fue un gran impacto que Calev repentinamente defendiera a Moshé.
Calev dijo: “¿Es eso todo lo que el hijo de Amram hizo?”. Esto silenció a la multitud mientras escuchaban su siguiente comentario, “¿Nos sacó de Egipto, nos partió el mar y nos trajo el maná y el agua?”. Al estar Calev apoyando a Moshé, la cuenta estaba 10 a 2 (Yehoshua y Calev), y los dos grupos de testigos se anulaban uno al otro.
* * *
Lágrimas Para Todas las Generaciones
Los espías se pasearon por el campamento, toda la noche, asustando a la gente sobre la dificultad de entrar a Israel. El resultado fue que el pueblo lloró toda la noche y se negó a entrar a la tierra. Dios proclamó: “Lloraron sin razón, ¡entonces yo les voy dar una buena razón para llorar!”. Esa noche era el nueve de Av, que se ha convertido a través de la historia en una noche triste y de lágrimas para todas las generaciones. Por el decreto de morir en el desierto, cada nueve de Av, durante 40 años, todos los hombres cavaban tumbas y se iban a dormir en ellas, y algunos ¡no se levantaban!
También en esta fecha, los dos Sagrados Templos de Jerusalem fueron destruidos. En 1942, los judíos fueron expulsados de España. (Tal vez por eso Colón tenía tantos judíos en su barco). También en esta fecha, explotó la Primera Guerra Mundial, y es bien sabido que la Segunda Guerra Mundial fue simplemente una continuación de la primera y un resultado directo de su desenlace.
* * *
Muerte de los Espías
Los espías tuvieron una muerte horrible. De acuerdo al Midrash, sus lenguas crecieron hasta hacerse muy largas y alcanzar sus ombligos. Luego gusanos salieron de sus lenguas y entraron por sus ombligos y los mataron. Por supuesto, el mansaje era que su pecado de “Lashón Hará” (habladuría negativa) envenena el cuerpo.
Pregunta: El objeto de su lashón hará era la tierra de Israel. ¿Por qué está prohibido calumniar a un pedazo de tierra?
Respuesta: Después de que Dios prometió al pueblo una buena tierra, cualquier movimiento contrario era considerado como un movimiento directamente en contra de Dios.
El pecado de los espías de calumniar a la tierra de Israel se enfatiza con la conexión con el final de la Parashá previa, cuando Miriam fue castigada por Lashón Hará. Todo el pueblo judío tuvo que esperarla por una semana. Por supuesto que ellos dedicaron esa semana a repasar las leyes de Lashón Hará (ve “Guard your Tongue” de Zelig Pliskin), entonces que el pecado de los espías viniera inmediatamente después era particularmente severo.
* * *
A Pesar de Todo
Cuando el pueblo escuchó las malas noticias de que no entrarían a la tierra, hubo algunos que decidieron arrepentirse. “¡Ahora subiremos a la tierra!” declararon, a pesar de que Dios dijo que no subieran. Ellos prefirieron arrepentirse “a su manera”, haciendo lo que Dios había ordenado previamente y no lo que Él había dispuesto posteriormente. Obviamente, este no es un arrepentimiento adecuado, y al no escuchar la advertencia de Moshé, esta gente fue diezmada por los Amalekitas y los Canaanitas que se abalanzaron desde las montañas. La lección es: ¡Hazlo “a la manera de Dios”!
* * *
Predicción de una Entrada Eventual a la Tierra
La parashá termina con ofrendas que el pueblo judío debe llevar “cuando entres a la tierra que te estoy dando” (Números 15:2). El propósito era aliviar los temores de la gente, en caso que ellos estuvieran preocupados de que luego de 40 años deambulando por el desierto, incluso sus descendientes tendrían que esperar otros 40 años antes de entrar a la tierra.
* * *
Profanación del Shabat
En el segundo Shabat después de Sinai, un judío anónimo (posiblemente Tzlafjad, el padre de 5 hijas. ver Números 27) quería demostrar la severidad del Shabat, para que la gente lo tomara con más seriedad. Él recogió (o cortó) madera en Shabat recibiendo advertencias ante dos testigos, sometiéndose de esta manera a la pena de muerte.
Cuando no era claro qué método de pena de muerte debía administrarse, Tzlafjad fue puesto en prisión (con el blasfemador) y Moshé le preguntó a Dios. La respuesta fue “lapidación”, que fue rápidamente llevada a cabo.
* * *
Tzizit
Dios nos ordenó poder flecos en cada prenda de vestir de cuatro puntas. A primera vista, los flecos no parecen cumplir ninguna función. Cuando alguien tiene un hilo colgando, instintivamente lo arranca.
Pero algunas personas, se amarran un hilo alrededor de sus dedos para recordar cosas. Los Tzizit nos recuerdan que Dios nos está observando todo el tiempo. El hilo azul (teñido con la sangre de un molusco llamado “jilazón”) nos recuerda el mar y el cielo. Hoy en día, la mayoría de las personas no utilizan el hilo azul porque perdimos la tradición sobre la identidad del “jilazón”.
La Torá dice que cuando vistes Tzizit, se te recuerdan las obligaciones de un judío. Los Tzizit nos recuerdan todas las 613 mitzvot, dado que la gematria (el valor numérico de las letras) de la palabra Tzizit es 600. Suma a esto los 5 nudos y los ocho hilos, y el total es 613
La Torá sugiere que no vas a ir tras idolatría o promiscuidad cuando veas los tzizit. Es costumbre tener los tzizit hacia afuera como recordatorio, pero no es un requerimiento. Si ves los tzizit, te acuerdas de Dios. Si te abstienes de la idolatría y de la inmoralidad, serás santo, y obtendrás el regalo del amor de Dios. ¡Y todo esto es para recordarnos constantemente del Éxodo de Egipto!
http://www.aishlatino.com/tp/i/pv/95409104.htmlUna cuestión de honor
“…todos ellos se contaban entre los hombres, entre los principales de los hijos de Israel…” (Bamidvar 13,3)
Toda vez que en la Tora se menciona la palabra “hombre” (en nuestro caso “hombres”) es para darle más valor a esa persona, y en ese momento todos eran hombres aptos, correctos (Rashi).
Entonces, vemos que eran personas muy importantes, y más al ver que estaban agrupados junto con Iehoshua y Caleb... El Ramban nos agrega que el orden en que se enumeran no corresponde a la importancia de cada tribu sino a las virtudes de cada uno de ellos, ya que eran príncipes de las tribus, pero aunque podamos pensar que todos estaban a la misma altura, vemos que había diferencias entre ellos, tanto en edad como en sabiduría, y los versículos anteponen y dan los honores de ser los primeros a los que sobresalen por su inteligencia, sin importar a que tribu pertenecían...
Los versículos los califican como “hombres” (importantes) y aptos para la misión encomendada, y encontramos entre ellos a Caleb, en el tercer lugar y a Iehoshua, en la quinta posición. El versículo agrega que son las “cabezas” de los hijos de Israel, lo que se debe entender tal cual como está escrito, los hombres más grandes e importantes de la generación del desierto, la generación que tuvo el mérito que no tuvieron otras generaciones, la generación que recibió la Tora directamente de Hakadosh Baruj Hu.
Y nos corresponde intentar comprender como en tan corto tiempo, los hombres que acabaron de recibir la Tora, pudieron descender espiritualmente como en caída libre, en tan solo cuarenta días. Esos “hombres” que son llamados así para resaltar su condición de grandes personas, y entre ellos tan grandes como Iehoshua, el futuro maestro y conductor del pueblo de Israel, pasan de la categoría espiritual más alta hasta caer en la más baja mediocridad, hablando mal de la tierra de Israel, y convenciendo al pueblo de que las promesas de Hakadosh Baruj Hu son falsas, lo alenu...
Y no sólo eso, sino que renegaron a todo cuando dijeron: ...no podremos contra el pueblo porque es más fuerte... (la explicación común de la Tora indica allí que el pueblo que habita la tierra es más fuerte que el pueblo de Israel, pero Jazal nos explican en el tratado de Sota, hoja 35 y según las palabras de Rashi, que los espías tuvieron la intención de decir que ese pueblo era más fuerte que Hashem, jas veshalom).
¿Cómo explicar semejante descenso en sólo cuarenta días?, pregunta el rab hagaon Jaim Shmuelevich ztz”l.
Encontramos algo que nos puede ayudar a comprender esto en el libro “Mesilat Iesharim” (final del cap. 11), donde habla sobre lo inconveniente que resulta el deseo de honores, y como puede provocar que personas buenas caigan en sus redes y “desaparezcan” del mundo. Así escribe el Ramjal, el rab hagaon Moshe Jaim Luzato ztz”l: el deseo de honor fue lo que provocó, de acuerdo a la opinión de Jazal (Zohar Hakadosh sobre las palabras “todos hombres”), que los espías hablaran mal de la tierra de Israel, causando la muerte de ellos y de toda esa generación, a consecuencia del miedo de perder parte de sus poderes al ingresar a la tierra de Israel, al dejar de ser príncipes al entrar a la Tierra, siendo reemplazados por otros hombres...
Jazal nos han revelado el secreto, la carrera en busca del poder, del honor, el miedo a “perder posiciones”, a ser reemplazados por otros y quedar un poco más abajo, puede provocar la ejecución de un plan para convencer a todo un pueblo de que no es conveniente, ahora, entrar a la tierra de Israel, hablando mal de la tierra, y haciendo creer al pueblo que los habitantes de la tierra son tan fuertes, incluso, jas veshalom, más fuertes que el mismo Hakadosh Baruj Hu.
Porque el deseo del honor es un veneno, y el correr detrás de él, inclusive para personas tan importantes e inteligentes, los hace caer hasta el punto de renegar a su creencia, como nos dice el Pirke Avot (cap.4 Mishna 21), que el honor es una de las cosas que sacan a la persona del mundo...
Y encontramos algo todavía más grave, todo el miedo que tenían de poder ser reemplazados por otras personas, que dejarían de ser príncipes, ¿a qué se refiere? No estamos hablando aquí del príncipe de la tribu, ya que según el Baal Haturim estos príncipes no eran la persona más relevante de cada tribu, como está escrito ...cabezas de los hijos de Israel, y la palabra “hema”, en hebreo, tiene el valor numérico de cincuenta, que nos enseña que eran los encargados, los responsables de ocuparse de cincuenta personas, o sea, que había en el pueblo de Israel, seis mil encargados de “cien” y seicientos encargados de “mil” que estaban en una categoría más alta que ellos, y otros doce mil encargados de “cincuenta” que tenían la misma importancia que ellos, con lo que vemos, que estaban muy lejos de ser “la persona importante de la tribu”, y no podemos comprender cómo pudieron hacer semejante cosa, para mantener la categoría de seguir siendo encargados de “cincuenta”.
No se trata aquí de una gran pérdida de honor sino de la pequeña posibilidad de una insignificante disminución, a cambio de provocar que el pueblo de Israel no ingrese a su tierra sagrada en su debido momento.
Aprendimos que en el momento que la persona siente miedo a ser “tocada” hasta en lo más mínimo, pierde el control de su ser y se convierte en una aplanadora que destroza todo lo que se interpone en su camino para conservar su supuesta importancia, dejando de lado cualquier virtud o cualquier comportamiento que lo describa como una persona. Lo vemos en los espías, el miedo terrible de ser despojados del título de encargados de “cincuenta”, algo en realidad no tan importante, pero por no dejar ese lugar eran capaces de cualquier cosa. Y lo vemos todos los días en cualquier situación cuando una persona alcanza a ocupar determinada posición, siempre y cuando no sea el último escalón, enseguida aparece el miedo de que alguien lo pueda empujar más abajo. Y ese miedo obliga a la persona a crear defensas innecesarias, todo por culpa de ese deseo de proclamar “miren, estoy más arriba”.
Esta sensación, la necesidad de honores, resulta ser una cualidad desagradable además de ser en extremo peligrosa.
Pero, la búsqueda de honores se torna peligrosa solamente cuando se genera por el exagerado amor propio y por el gran deseo de honores. Hay una posibilidad de encontrar también algo bueno cuando una persona busque conseguir honores pero no por amor propio, sino por algún otro motivo, entonces, la búsqueda puede ser digna y hasta necesaria, como cuando buscamos honrar a nuestros semejantes, y podemos decir que cumplimos con un gran precepto, en el cual no existe ninguna prohibición.
Veamos por ejemplo, el caso que aparece en el libro de Shoftim (cap.11). Allí tenemos a Iftaj Haguiladi, en el momento en que se desencadena la guerra entre Amon y el pueblo de Israel. Los ancianos de Israel fueron hasta Guilad y le piden a Iftaj que se ponga al frente del ejército en la lucha con Amon. Iftaj les pone una condición para asumir el cargo, ser considerado la “cabeza”, el principal del pueblo de Israel.
Después está escrito que Iftaj le habló y le contó todas estas palabras al Bore Olam en Mitzpe, y Rashi explica: “todas estas palabras”, la condición que pidió a los ancianos de Israel, o sea, el pedido de ser considerado como el principal del pueblo de Israel, y entonces sí pelearía con Amon.
Aquí estamos frente a un claro pedido de honores: “yo seré el principal para ustedes”. Pero Rashi nos aclara que quien piense así se equivoca, ya que nadie puede llegar a ser tan sinvergüenza, ni la persona que se encuentre en la situación más desesperante, como para pedir honores delante de todo el mundo, y menos entonces, uno de los jueces del pueblo de Israel.
Además de realizar el pedido ante los ancianos del pueblo, después habla con Hakadosh Baruj Hu y repite todas sus palabras, como atestiguando la condición para ir al frente en la guerra.
Con total seguridad, Iftaj no corre detrás de los honores, sino que entiende que para poder vencer en la guerra, necesita que los soldados crean, valoren la capacidad de quien los lleva al frente, para que su moral esté en constante aumento, un factor determinante en cualquier emprendimiento. Para esto, Iftaj necesita que se lo considere el conductor del pueblo, un conductor con poder, para transmitirlo a sus soldados.
Esta era la pura intención de Iftaj, con lo que vemos que a veces, la búsqueda de honores es sana y necesaria. Por eso hasta pudo hablar sobre su pedido con Hashem, sabiendo que su pedido no era para su propio provecho sino a favor del pueblo, algo que está por encima de las cualidades normales de las personas.
En el caso de Shimshon Haguibor el versículo dice: …y Shimshon llamó a Hashem y le dijo… recordame, por favor, dame fuerzas, por favor, esta vez… y será una venganza por mis dos ojos contra los pilishtim (Shoftim, cap.16). Y Rashi explica: “recordame, por favor”, que Hashem recuerde los veinte años que Shimshon juzgó al pueblo de Israel y jamás le pidió a alguien que le mueva su bastón de un lado a otro. Una venganza, porque el premio debido al segundo ojo Shimshon lo quiere guardar para sí mismo, para el Olam Haba.
Y con esta venganza, Shimshon mató más personas en un instante que las que mató durante toda la vida, y todo esto gracias al mérito de no haber pedido jamás, a ninguno de los integrantes del pueblo de Israel, que le mueva el bastón de un lado a otro, ya que si hubiera hecho este pedido aunque tan solo sea una vez, no tendrían ningún valor sus ruegos para pedir venganza, ya que habría utilizado (o comido) el premio, como escuchamos en nombre del rab hagaon Israel Salanter ztz”l, que este mundo es un “hotel de lujo”, extremadamente caro, y que todo provecho que sacamos de él lo tenemos que pagar con valores que hubiéramos podido utilizar en el mundo venidero…
Y surge la pregunta: después de que Shimshon juzgó al pueblo durante veinte años, no cabe duda que fue honrado durante todo ese tiempo con los honores que un juez merece, con lo que “sintió” y recibió honores muchas veces, y mucho más de lo que puede significar pedir que le muevan el bastón de un lugar a otro, entonces, ¿cómo puede alabarse a sí mismo argumentando que no se adjudicó honores a cuenta del pueblo de Israel?
Así contestamos la pregunta, Shimshon alcanzó la cualidad de “igualdad”, y de todos los honores con que fue honrado, no tomó ningún provecho, como si en su lugar hubiera sido honrada otra persona, con lo que encontramos que en los veinte años durante los que juzgó a Israel no se permitió hacer uso del honor.
Y todos nosotros podemos llegar a esta categoría. Mientras todo el mundo corre detrás del honor, detrás del nombre y del poder, podemos mantener un perfil bajo para no enfermarnos, para no sentir necesidad de honores.
Dijo Moshe Rabenu: no tomé de ellos ni siquiera un burro… (Bamidvar 16,16), y Rashi explica: cuando viajé desde midian hacia egipto, subí a mi esposa y a mi hijo sobre el burro, y yo debía haberme subido al burro, y no lo hice…
Así como podemos llegar a esto, también debemos intentarlo con todas nuestras fuerzas, sin dejarnos deslumbrar por el falso brillo de los honores, buscando que el honor sea para nuestros semejantes.
Sabiendo, que a pesar que la búsqueda del honor resulte ser algo despreciable, hasta sin medida, esto es así cuando lo buscamos para nosotros, pero cuando resulta ser para los demás, estamos obligados a intentar encontrarlo por todos los caminos, poniendo todo nuestro esfuerzo…
Sijot Musar.
Leiluy Nishmat Harav Hagaon Moshe Shlomo Halevi ben David זצ"ל
Los espías, los hombres que Moshe Rabenu envió para hacer un relevamiento de las bondades de la tierra de Israel, eran personas muy importantes, así estudiamos de las palabras de Rashi, sobre el versículo que dice “culam anashim”, ya que toda vez que la Tora menciona la palabra “anashim”, decimos que se trata de un lenguaje que da importancia, por lo que continúa Rashi diciendo que en ese momento eran personas “aptas”, preparadas para la misión encomendada por Moshe.
Y si queremos tener una noción del grado de aptitud que poseían, alcanza con mencionar que Iehoshua, fue solamente el quinto en la lista que la Tora enumera en orden de importancia. O sea, hablamos de hombres muy importantes. Y por supuesto, surge la pregunta, ¿cómo pudieron caer estos hombres en un tiempo tan corto, desde la cima donde estaban hasta un pozo tan profundo, hasta decir palabras tan feas sobre la tierra de Israel?
Y no solamente hablaron mal de la tierra, hasta llegaron a hablar mal de Hakadosh Baruj Hu, cuando dijeron: “debido a que Hashem nos odia, nos sacó de la tierra de egipto...” (Devarim 1). Y más agregaron: “...porque son más fuertes que nosotros”, a lo que Rashi explica, en nombre del Midrash que dijeron esto pensando en el Bore Olam, que el pueblo que habitaba la tierra de Israel era más fuerte que Hakadosh Baruj Hu, jas veshalom. Jazal nos traen un ejemplo, de la persona que presta sus cosas a su compañero y después no puede recuperarlas, ni siquiera por la fuerza.
Así ellos vieron la situación de la tierra de Israel, que estaba en ese tiempo ocupada o habitada por unos pueblos y que ni siquiera Hashem podía sacarlos de la tierra. Todo esto refuerza y agranda nuestra pregunta, ¿cómo?, ¿cómo es posible una caída espiritual “en picada” en un tiempo tan corto y en personas tan “grandes”?
Jazal traen muchas respuestas a esta pregunta. Vamos a desarrollar una de las respuestas, que puede tener preferencia sobre las demás porque así aparece escrito en la Tora, según veremos de las palabras del rab hagaon Iejezkel Levinstein ztz”l, en su libro “Iad Iejezkel”.
Hay una palabra que “molesta” en la perashat Devarim, pero que nos ilumina para dilucidar nuestra duda, y que además nos brindará un magnífico aprendizaje. Dice allí “vateragnu” y agrega que porque Hashem nos odia... Esta palabra es una expresión idiomática, tiene un cambio lingüístico que no encontramos en todo el “Tanaj” (Tora, Neviim y Ketuvim), ni tampoco en el lenguaje que hablamos cotidianamente.
Explicaremos “vateragnu” como proveniente de la palabra “nirgan”, ¿quién es nirgan?, la persona que siempre tiene en su boca quejas. En todo momento escuchamos de su boca que los males lo persiguen, que está lleno de problemas, que nada está bien. Vive quejándose de todo y de todos, piensa que el mundo está “serruchando” el piso donde se para, todos buscan su mal. Rabenu Iona escribe al final del capítulo tres del Shaare Teshuva, que una persona así hasta contra Hashem tiene quejas.
Y hasta cuando Hashem le da cosas buenas llega a pensar que estas cosas buenas tampoco tendrán un buen final!
Para nuestra desgracia, esta cualidad tan mala se encuentra muy arraigada entre nosotros, entre los mayores y muy especialmente entre los más jóvenes. Los, llamémoslos, “quejosos”, nunca están conformes con nada, viven llenos de quejas hacia todas las personas.
Son “especialistas” en encontrar defectos entre sus semejantes, y toda cosa que llega a sus bocas tienen como explicarlas con un mal sentido. Y llegan a encerrarse en esa mala cualidad de forma que sus interpretaciones, que no son verdaderas, las consideran como la única verdad. Y no por tratar de mentir, están seguros que esa es la verdad absoluta.
La Tora nos atestigua que esa es la cualidad que lamentablemente adquirieron los “espías”, y que una vez adquirida, no pudieron ver ninguna cosa buena y “derecha” en la tierra de Israel.
Y veamos hasta dónde se puede llegar. Entre las cosas que dijeron sobre la tierra encontramos: “tierra que se come a sus habitantes”. Uno de los explicadores de la Tora dijo que ellos aplicaron en su descripción un mensaje profundamente espiritual, diciendo que la tierra de Israel tiene una gran Santidad, muy por encima de cualquier otra tierra, por lo tanto, no es apta para nosotros. Por cuanto que la tierra es tan sagrada, ella no acepta en su seno personas que realicen acciones malas que la puedan impurificar. Jazal nos trajeron un ejemplo, con el hijo de un rey que está acostumbrado a comer diariamente los más exquisitos manjares. Si un día le traen para comer una comida común, o un fruto que tenga alguna falla, su estómago no estará preparado para recibir semejante “engaño”, semejante desprecio, y todo terminará con un vómito! No será así si cualquier otra persona o algún animal comen esta comida o este fruto, la comida está perfecta y no provoca ningún daño a nadie.
Este era el mensaje de los espías, esto es lo que provocaba la santidad de la tierra de Israel, mientras que otras tierras podían aceptar ser habitadas también por personas que cometieran pecados, la tierra de Israel no podía permitirse recibir habitantes que no sean de la mejor categoría.
Vinieron los espías a decir que la gran cantidad de “muertes” que vieron en la tierra era con absoluta seguridad el hecho de que la tierra “escupía” a sus malvados habitantes. Por cualquier pequeño pecado morían allí las personas, ya que la tierra no podía soportar que pecadores vivan en ella e impurifiquen su Santidad.
Y agregaron más, haciendo un cálculo sencillo: si la gente que ya vive en la tierra, está sometida a un control tan estricto, es juzgada y castigada con la expulsión, con la muerte, a causa de cualquier cosa por más pequeña que sea, qué será del que todavía no entró en la tierra, el que desde afuera pretende ingresar, seguramente será juzgado de forma mucho más severa, con un juicio por demás meticuloso, observando cada detalle para ver si cada uno es digno o no de subir a la tierra de Israel. Y una vez que obtuvimos el permiso para ingresar, estaremos siempre en peligro de ser “expulsados”.
Esto es lo que se genera después de la primera apreciación, desde luego equivocada. Si ellos hubieran tenido la orientación apropiada, de inmediato habrían dejado de lado este pensamiento basándose en un razonamiento simple y lógico. Sin pensar hacia el mal, toda deducción habría arribado a una conclusión positiva.
Básicamente tenían que haber pensado que si Hakadosh Baruj Hu nos prometió la tierra de Israel y nos garantizó que estábamos en condiciones de conquistarla, es porque era una cosa que estaba al alcance de nuestras manos.
Podemos decir que, bueno, seguro que en la tierra de Israel necesitamos conducirnos dignamente, respetando su Santidad, por eso, cada integrante del pueblo de Israel estaba obligado a poner de su parte lo máximo para lograr ese objetivo.
Pero, había que entender una cosa elemental: todo el que invirtiera lo mejor de sí para elevarse y ponerse a la altura de la Santidad de la tierra y no alcanzara dicha meta, se haría acreedor de la “siata dishmaia”, el mismo Hakadosh Baruj Hu saldría en su ayuda. ¿Por qué?, porque hizo “todo” lo posible.
Y esto fue lo que les propuso Caleb: “A subir, subamos y heredémosla, porque poder, podemos...”, y Rashi explica: “subir, inclusive hasta el cielo, y siguió, hagamos escaleras y llegaremos al cielo, y tendremos éxito en todos nuestros emprendimientos”.
¿Cómo se atrevió Caleb a decir algo semejante, acaso alguien estaba dispuesto a construir una escalera para llegar al cielo? Lo que Caleb quiso decir con esto es que si Hakadosh Baruj Hu nos hubiera ordenado hacer algo así, quería decir que era algo más que posible para nosotros.
Y aunque sabemos de antemano que una persona no tiene las posibilidades de hacer una escalera que llegue al cielo, en este caso, la posibilidad existe y con mucha fuerza, ¿por qué? Solamente porque el Bore Olam nos lo ordenó, quiere decir que es posible y nosotros tenemos que poner todo nuestro esfuerzo para llevar adelante el proyecto! Y después que hicimos nuestra parte, con todo nuestro potencial, siempre llega la ayuda de Hakadosh Baruj Hu para completar la realización, para hacer posible lo que parecía imposible.
Volvamos a nuestro asunto. ¿Cuál fue el punto de discordia entre Iehoshua y Caleb, y el resto de los espías? ¿Por qué Caleb aseguraba que era posible, mientras que el resto de sus compañeros estaban en la otra punta, argumentando la absoluta imposibilidad? La pregunta no es pregunta después de todo lo que ya desarrollamos, los espías estaban invadidos de esa mala cualidad, el ser “quejosos”. Las quejas y la permanente “mala onda” enceguecía sus ojos y no les permitía apreciar la prometedora verdad. Iehoshua y Caleb no adquirieron esa mala cualidad. Sobre Iehoshua encontramos en la Tora la prueba de que se mantuvo con la verdad: “y Moshe llamó a Oshea Bin Nun, Iehoshua”, y el “Targum Ionatan Ben Uziel” explica: porque Moshe vio la humildad en Oshea Bin Nun lo llamó Iehoshua.
Estaba a la vista de Moshe Rabenu, Iehoshua siempre ordenaba los bancos del Beit Hamidrash. Nunca una queja, nunca pasó por su cabeza el pensar que un trabajo tan sagrado como ese, era muy sagrado, pero no de acuerdo a su gran categoría y honor, sino que lo hacía con toda su humildad. Y vemos que la humildad es el polo opuesto del “nirganut” (la cualidad que nos costó tanto explicar en nuestro idioma pero que en Hebreo, en el lenguaje Santo, es una simple palabra). La persona que se conduce con humildad, no exige nada para sí. No piensa que esto u otra cosa le “corresponde”, por eso no tiene quejas. Cuando una persona llega a adquirir la gran virtud, la humildad, puede ver la realidad, puede ver las cosas como son.
Vemos entonces, hasta dónde puede transformarnos el ser quejosos, hasta llegar a la terrible conclusión que Hakadosh Baruj Hu nos trajo a la tierra de Israel porque quiere matarnos!!! Esta mala cualidad de la permanente sospecha y desconfianza, acompañada de fervientes quejas causa daños irreparables.
Solamente el que persigue la “virtud”, la humildad, tiene en sus manos la verdad. Todo lo que ve, lo ve con “buen ojo”, y encuentra méritos a cada cosa que ve en sus compañeros, con lo que nunca tiene una queja.
Y, lamentablemente, en nuestra generación la atmósfera está inundada de quejas, en todos los estratos sociales, en casi todos los ámbitos. No es muy común ver que las personas se alaben (franca y sinceramente) unas a las otras, no es común ver que nuestras miradas enfoquen con “buen ojo”. Investigar a nuestros semejantes, cercanos o lejanos, inclinando la balanza hacia la culpabilidad, es lo que más se ve en este mundo.
Tenemos que hacer un “corte” urgente, separarnos de esta forma de pensar, y no permitir que entre nosotros, que pretendemos ser buenos iehudim, personas de bien, orientados por nuestra sagrada Tora, que nos enseña el camino correcto, se siga desparramando esta cualidad nada buena.
Nuestro campamento tiene que seguir siendo el campamento santo, el campamento del Bore Olam, nosotros somos sus hijos, y debemos aferrarnos a la humildad, para alejarnos de investigaciones injustas, que nos separan, lo alenu, de nuestro Creador. Necesitamos fortalecernos, para cumplir mejor los preceptos que nos relacionan con Hashem y con nuestros semejantes. Que podamos proclamar la humildad con humildad. Y cuando veamos la bala, no pongamos el ojo, dejémosla pasar...
Lekaj Tov.
Leiluy Nishmat Ruben Daniel ben Malca Victoria z”l
Shelaj Lejá
Por Rab Menajem Abdeljak
Moshé, por pedido de los Iehudim, envía doce espías para que exploren la tierra de Israel. De estos, diez regresaron con un reporte negativo, advirtiendo del gran peligro al cual que implicaría entrar a Eretz Israel. Ellos decían que los Canaanitas, nativos de la tierra, son muy fuertes y será imposible vencerlos y conquistar su país. Y el pueblo les creyó.
Caleb ben Iefuné, el enviado por la tribu de Iehudá, se paró sobre un banco, vociferó al pueblo pidiendo silencio y dijo: “¡No es esto lo único que nos ha hecho Moshé, bastante ya hemos tenido de él!”
El pueblo, que estaba ya caldeado por las palabras de los otros espías, se agrupó en torno a él y entonces comenzó su discurso: “¡Cuánto nos ha hecho! Nos ha sacado de la esclavitud, nos hizo partir al mar, nos bajó el Man. Ahora, confiemos en él. ¡Subamos y tomemos posesión de la tierra, aunque nos dijera que tenemos que subir al cielo con escaleras, merece nuestra confianza!”
Pero el pueblo no le cree. Ellos consideran confiable la perspectiva de la mayoría.
Luego, él y Iehoshúa bin Nun, representante de la tribu de Efraim, confirmaron la profecía de Hashem a Abraham, Isjak y Iaakob, desgarraron sus ropas ante la triste situación que se generó como consecuencia del informe e instaron al pueblo a reconfortarse, confiar en el Creador y seguir optimistamente el camino a la tierra prometida.
La historia en general tiene un desenlace lamentable. Hashem se disgusta mucho por la actitud de la mayoría del pueblo y les notifica que ninguno de estos espías ni los que aceptaron sus reportes van a tener la oportunidad de ingresar a Eretz Israel. Excepto Caleb y Iehoshúa.
Pero si bien los dos fueron destacados por confiar en Hashem y animar al pueblo, la Torá no los recalca por igual.
Así le dice Hashem a Moshé: “…todos aquellos hombres que han visto mi gloria y las señales que he hecho en Egipto y en el desierto, y con todo me pusieron a prueba ya diez veces y no han obedecido a mi voz, ninguno de ellos verá la tierra que prometí con juramento a sus padres, ni ninguno de los que me han irritado, la verá. Mas mi siervo Caleb, porque hubo otro espíritu en él y perseveró en seguirme, Yo le introduciré en la tierra adonde entró, y su descendencia desterrará a sus habitantes.”
Diles: “…En este desierto caerán vuestros cadáveres… todos los que habéis calumniado contra Mí. Ciertamente no entraréis en la tierra respecto a la cual alcé mi mano, en señal de juramento, para habitar en ella, excepto Caleb ben Iefuné, y Iehoshúa bin Nun.”
Si bien la Torá resalta que ambos se comportaron correctamente y por ello serán los únicos dos en poder entrar a Eretz Israel, Caleb tiene un privilegio evidente respecto de Iehoshúa; es nombrado dos veces, mientras que Iehoshúa sólo una, además, al ser mencionados juntos, Caleb está primero, además fue premiado con recibir para él y su descendencia la tierra de Jebrón, a la cual él acudió para visitar la tumba de los patriarcas para hacer Tefilá y pedir que Hashem lo proteja de no tropezar con la idea del resto de los compañeros de expedición. Y por si todo esto fuera poco, se lo distingue con un distintivo especial “mi siervo Caleb”
¿A qué se debe esta preferencia?
* * *
Cuando Hashem le aceptó a Moshé tomar en cuenta el deseo de los Iehudim de enviar espías, le adelantó que se iban a equivocar en su apreciación. Entonces, al momento de la partida, Moshé bendice a Iehoshúa, y pide Tefilá por él para que no sea arrastrado por la corriente malévola de los maldicientes. De esta manera, estuvo protegido en todo momento y nunca entró en el error del resto del grupo.
No así Caleb. Él estaba junto a todos y en las mismas condiciones y estuvo a punto de correr la misma suerte de no ser por su propia labor.
Habiendo iniciado ya la expedición, se percató de la trama que estaba tomando el asunto, y entonces, en un acto de responsabilidad y de no poca osadía, se alejó del grupo y se dirigió a Mearat Hamajpelá, a la morada final de nuestros patriarcas, para pedir la ayuda de Hashem para poder salirse de ese enredo.
Es decir, Iehoshúa estuvo siempre a salvo del desliz y con apoyo de la bendición de Moshé Rabenu, pero Caleb estuvo dentro del peligro y se desenredó por su propio esfuerzo.
Aquí reside la clave. A Caleb se lo destaca más que su compañero y se lo galardona con el fabuloso título “Siervo de Hashem”, no por el sólo hecho de haberse mantenido fiel a Hashem, sino por la batalla que dio para lograrlo.
¡Shabat Shalom!
Por Rab Menajem Abdeljak
Basado en las enseñanzas del Rebe Najman de Breslev
MITSVÁ #385
Dar un pedazo de la masa al Cohén (Jalá)
Fuente: Las primicias de sus masas ofrecerán como ofrenda (Bamidbar 15:20)
Razón: siendo que la mayoría de las personas viven del pan, Hashem nos pidió que de lo esencial de nuestro alimento lo acerquemos a Él, y siendo esto un apoyo a los Cohanim, que eran los que se ocupaban del Servicio Divino, llegándoles el sustento de manera fácil.
Tiempo: en tiempos que la mayoría del pueblo de Israel viva en la tierra de Israel.
Lugar: en Erets Israel.
Quién está obligado: Todo el pueblo de Israel.
Extraído del “Sefer Hajinuj”
Esta edición está traducida y adaptada del libro "TORAT HAMOADIM"del RAB DAVID IOSEF Shlita (Director de la Academia Rabínica "YEJAVE DAAT") Basado en las Enseñanzas del Rishon Letzion RABBI OVADIA IOSEF Shlita.
Traducción y Editor Responsable Rab. Eliahu Yazdi
El sentido de los cuatro (4) Ayunos
1. Fue dicho en Zejaria (capítulo 8, versículo 19): "Así dijo Hashem de las huestes, el cuarto (4º) Ayuno y el quinto (5º) Ayuno y el séptimo (7º) Ayuno y el décimo (10º) Ayuno serán para la casa de Iehudá para alegría y regocijo y para festividades, y la verdad y la paz, Amen". Y comentaron nuestros Sabios (en Masejet Rosh Hashaná, hoja 18), que el cuarto (4º) Ayuno se refiere al 17 de Tamuz, por cuanto que el mes de Tamuz es el cuarto (4º) contando desde el mes de Nisán. Y el séptimo (7º) Ayuno es el Ayuno de Guedalia, que es el 13 de Tishrei, que es el séptimo (7º) mes contando desde el mes de Nisán. Y el décimo (10º) ayuno es el 10 de Tebet, que acontece en el décimo (10º) mes contando desde Nisán.
Y escribió el Rambam (en el capítulo 5 de Halajot Taanit, 1º Halajá), que todo Israel ayuna en estos días por las desgracias que les acontecieron a ellos, para despertar los corazones y abrir los caminos de Teshuvá, y que sean estos días para recordar nuestras malas acciones y aquellas acciones de nuestros antepasados que eran como las nuestras ahora, hasta que les provocó tales desgracias, tanto a ellos como a nosotros, que por medio de recordar estas cosas volveremos al sendero correcto, como fue dicho: "Y confesaran sus pecados y los de sus antepasados".
2. Estas son los acontecimientos negativos que le ocurrieron al Pueblo de Israel en estos días:
En el día 17 de Tamuz ocurrieron cinco (5) cosas difíciles, y ellas son:
Se rompieron las Tablas de la ley.
Se interrumpió la ofrenda permanente diaria del Beit Hamikdash (Gran Templo de Jerusalém).
Los enemigos rodearon la muralla de Jerusalém en la época de la destrucción del Segundo (2º) Beit Hamikdash.
Apostomos, el malvado, quemó la Torá.
Se erigió una estatua en el Ejal del Beit Hamikdash
En el día de Tishá Be Av acontecieron cinco (5) cosas difíciles, y ellas son:
Se decretó sobre nuestros Patriarcas en el desierto que no entrarían a la Tierra de Israel por el pecado de los merraguelim (espías que fueron a incursionar la Tierra de Israel).
Se destruyó el Primer (1º) Beit Hamikdash.
Se destruyó el Segundo (2º) Beit Hamikdash.
Cayó la gran ciudad de Betar en manos de los romanos y fueron asesinados en ella miles y miles de judíos.
Destruyó Tornosropus, el malvado, el Ejal y sus alrededores, como está escrito (Mijá, capítulo 3, versículo 12) "El campo de Tsión será destruido".
En el día 13 de Tishrei fue asesinado Guedalia hijo de Ajikam, se terminaron de morir los sobrevivientes que estaban en la tierra de Israel luego de la destrucción del Primer (1º) Beit Hamikdash.
En el día de Asara Betebet (10 de Tebet) el Rey Nabuconodosor sitió la Ciudad de Jerusalém.
3. Todos deben ayunar en los cuatro (4º) Ayunos mencionados. Incluso los Eruditos de la Torá que su Torá es su profesión, y el ayuno los molesta impidiéndoles ocuparse de la Torá, ó aquellos que enseñan a niños y el Ayuno los dificulta en su tarea de enseñar, tienen que ayunar en los cuatro (4) Ayunos (y también en el Ayuno de Ester). E incluso los obreros deben ayunar, a pesar de que el Ayuno les dificulta en su trabajo.
4. La obligación de los Ayunos del 17 de Tamuz, del Ayuno de Guedalia y del 10 de Tebet, es a partir del alba y hasta la salida de las estrellas. Y en Tishá Be Av se empieza a ayunar desde la puesta del sol del 8 de Av, por los graves acontecimientos que acaecieron en este día. Y el que se esfuerza por comenzar el Ayuno desde la noche incluso en los otros Ayunos, será bendecido.
5. A pesar que la obligación de ayunar comienza desde el alba (excepto en Tishá Be Av), de todos modos si durmió por la noche y se despertó en el medio de la misma, no puede comer ó tomar incluso antes del horario permitido, por cuanto que ya había puesto la intención de interrumpir la comida y la bebida.
Pero si puso intención antes de irse a dormir que se levantaría para comer ó tomar antes del alba, le es permitido comer ó tomar hasta ese momento.
Los Ashkenazim son más leves en cuanto a tomar agua, ya que incluso aunque se haya ido a dormir, y no puso la condición antes de hacerlo, le es permitido tomar antes del alba, siempre y cuando esté acostumbrado a levantarse a la noche para tomar agua para apaciguar su sed.
6. En todos estos ayunos, excepto en Tishá Be Av, está permitido lavarse, untar cremas y perfumes, usar calzado de cuero y tener relaciones íntimas; de todos modos, el que se cuida de no bañarse con agua caliente en un Ayuno, será bendecido. Y hay algunos Ashkenazim que se cuidan de no bañarse con agua caliente en un Ayuno. Y si cae el día del Ayuno en vísperas de Shabat, según todas las opiniones está permitido lavarse con agua caliente todo el cuerpo en honor al Shabat.
7. En el caso que el Ayuno del 17 de Tamuz, el Ayuno de Tishá Be Av y el Ayuno de Guedalia acontezcan en Shabat, se posterga el Ayuno para el día siguiente, ó sea para el día Domingo (pero el 10 de Tebet nunca cae en Shabat). Y si acontece el Ayuno del 10 de Tebet en día Viernes, se debe completar el Ayuno hasta la salida de las estrellas, y no se permite comer cuando todavía es de día por honor al Shabat. Se dice "Anenu" y se lee en la Torá la Perashá "Vaijal Moshé" incluso en la plegaria de la tarde (Minjá) previa a Shabat. Pero no se dice "Vidui" (confesión) ni "Nefilat Hapaim" en Minjá (y el resto de los Ayunos nunca acontecen en vísperas de Shabat).
8. La costumbre de los Sefaradim es que el Jazán avise en el Shabat previo al Ayuno del 17 de Tamuz y del 10 de Tebet, cuando serán esos Ayunos. Y que lo anuncie antes del "Ashre" previo a "Musaf".
Y el resto de los Ayunos no se acostumbra a anunciarlos.
La costumbre de los Ashkenazim es no anunciar los Ayunos en general, e incluso el 17 de Tamuz y el 10 de Tebet.
9. Los dueños de restaurantes y hoteles que venden comida, se deben cuidar de no vender en el día del Ayuno a menos que sepan que el que come ó bebe es un enfermo que está exento del Ayuno, ó un niño que está exento del Ayuno, etc. E incluso si hubiera otros restaurantes en el mismo lugar que abastecen necesidades gastronómicas en el día del Ayuno a todo el que necesite, y si no come en su restaurante comerá en éstos, igualmente que se cuide de no vender comida a personas que deben cumplir con el Ayuno.
Y de todas maneras está permitido a los dueños de almacenes vender pan y el resto de los alimentos que no se comen allí, sino que cada uno los lleva para comer en su casa, por cuanto que uno se puede apoyar en que no es la intención del que los compra comerlos durante el Ayuno, sino cuando éste termine. Y también se puede suponer que la persona que compró estos alimentos lo hizo para alguien que está exento del Ayuno, como ser un enfermo ó un niño, etc.
10. Está permitido probar una comida en un Ayuno, para ver si necesita sal ó condimentos, siempre y cuando se percate de no tragar la comida que probó sino que la expele enseguida luego de haberla probado. Y está permitido que ingrese a su boca hasta una medida de reviit (ochenta y seis miligramos) (86 mg) si sabe que se percatará de no tragar nada. Pero si duda que tal vez traguar algo, que pruebe un poquito y lo expele enseguida. Y en el día de Kipur y de Tishá Be Av no le es permitido probar una comida incluso que sepa que puede expeler todo de su boca enseguida luego de haberla probado. Y los Ashkenazim se cuidan de no probar la comida en ninguno de los cuatro (4) Ayunos.
11. Es conveniente cuidarse de no enjuagarse la boca por la mañana al levantarse, en un Ayuno. De todas maneras, quien está acostumbrado y le cuesta mucho no enjuagarse su boca por la mañana, puede realizarlo, siempre y cuando se cuide que no entre a su boca más de una medida de reviit (ochenta y seis miligramos) (86 mg) en un (1) sólo buche, y que asimismo se percate de no tragar nada de agua, sino que la expele de inmediato.
Y de esta manera el que acostumbra lavarse los dientes con cepillo de dientes todas las mañanas, y le cuesta demasiado no lavárselos en un día de Ayuno, y asimismo el que tiene mal aliento si no se lava sus dientes con cepillo de dientes, le es permitido lavarse los dientes en un Ayuno según las condiciones enumeradas. Y en Tishá Be Av no se permite a menos que padezca un gran sufrimiento por esto ó por mal aliento y con una condición extra, que se cuide mucho de enjuagarse boca abajo, para que el agua no llegue a su garganta.
12. No está permitido mascar chicle en un Ayuno, a menos que no tenga sabor (excepto en Iom Kipur que lo correcto es ni siquiera mascar chicles sin endulzantes).
13. Una persona sana que ayuna, y debe tomar píldoras porque le duele la cabeza ó la garganta, etc., le es permitido tomarlas sin agua. Y si estas píldoras tienen endulzantes y se las mastica ó se disuelven en la boca, y no se las traga, hay que evitarlas. Y si las píldoras son por necesidad de un enfermo agudo, está permitido.
14. De acuerdo a la Halajá está permitido fumar en todos los Ayunos a aquel que está acostumbrado. Y de todas maneras es correcto ser más estricto en Tishá Be Av y evitar fumar por placer. Y cuan bueno y grato es evitar fumar durante todos los días del año, ya que es sabido y divulgado por grandes científicos y médicos que el fumar es muy dañino y provoca enfermedades difíciles y acorta la vida de la persona. Y que cuide su alma y se aparte de esto, cumpliendo la advertencia de la Torá: "Y cuidarán mucho sus almas".
Está permitido oler Tabak ó perfumes en el día de un Ayuno, exceptuando Tishá Be Av en donde hay que ser más estricto en esto.
15. El que se olvidó y comió en un Ayuno, y se acordó luego que realizó esto, no le es permitido seguir comiendo sino que debe completar el Ayuno. Incluso que haya comido en demasía no le es permitido seguir comiendo. Y de acuerdo a la Halajá no está obligado a ayunar en otro día, a menos que quiera reparar su equivocación. Mas si este Ayuno que quiere hacer en otro día para compensar su error lo perjudica en su estudio de Torá, no debe ayunar, y compensa su falta por medio de dar Tzedaká y estudiar más horas de Torá.
16. El que se olvidó y comió en un día de Ayuno, si comió un Kazait (veintinueve gramos (29 gr.) ó más, a pesar que debe completar su Ayuno que no diga "Anenu" en Minjá, pero si comió menos de está cantidad sí debe recitar "Anenu" en Minjá.
17. El que se olvidó y bendijo en un día de Ayuno sobre una comida ó bebida, y cuando iba a probarlos se acordó que estaba en un Ayuno, que pruebe de está comida ó bebida para no pronunciar una bendición en vano, ya que la prohibición de recitar una bendición en vano es más grave que la de comer en un día de Ayuno. Y de todos modos que se percate de probar sólo un poquito, para que su bendición no sea en vano (y es claro que no debe seguir comiendo). Y luego que probó de esta comida ó bebida, le es permitido decir "Anenu" en Minjá siempre y cuando no haya comido la medida mencionada, ya que no comió la medida especificada anteriormente.
18. Está permitido hacer una Jupá en el Ayuno del 10 de Tebet y en el Ayuno de Guedaliá (y asimismo en el Ayuno del 17 de Tamuz, de acuerdo a la costumbre de los Sefaradim que no hacen hincapié en la cuestión de no hacer casamientos sino a partir del principio del mes de Av). Y de todas maneras si es posible, es preferible postergar la Jupá para después de la salida de las estrellas del día del Ayuno.
Los exentos y los no exentos de los cuatro (4) Ayunos
1. Los niños están exentos de estos Ayunos, ni siquiera unas horas deben ayunar. E incluso si llegaron a la edad en que tienen conciencia del duelo por la destrucción del Beit Hamikdash, (trece (13) años para el hombre, doce (12) años para la mujer) están exentos de estos Ayunos. E inclusive que quieran ser estrictos consigo mismos y quieran ayunar, hay que impedírselo. Y hay quienes se cuidan de no dar en un Ayuno a los niños sino pan y agua, y esta es la costumbre de varias Comunidades Ashkenazim. Sin embargo de acuerdo a la costumbre Sefardí es darle a los chicos todo lo que necesitan.
2. Las embarazadas y las que amamantan están exentas de ayunar en el 17 de Tamuz, en el Ayuno de Guedaliá y en el 10 de Tebet. E incluso que quieran ayunar no hay que permitirles.
Se considera embarazada a toda mujer que se puede reconocer su embarazo cuando hayan transcurrido tres (3) meses de embarazo. Pero si sufre de nauseas y vómitos, está exenta de todos estos Ayunos también previo a los tres (3) meses de haber quedado embarazada. Y en especial si ya pasaron cuarenta (40) días desde que quedó embarazada.
Y una mujer que amamanta aunque haya dejado de amamantar si está dentro de los veinticuatro (24) meses de haber dado a luz está exenta del Ayuno. así como también una mujer que abortó está exenta del Ayuno en los veinticuatro (24) meses posteriores.
Las mujeres embarazadas, que están amamantando ó que abortaron, y que están exentas del Ayuno, es preferible que coman únicamente lo necesario y no que coman postres ó comidas innecesarias.
3. Un enfermo que está fuera de peligro, está exento de ayunar durante los cuatro (4) Ayunos, por cuanto que los Jajamim no decretaron estos Ayunos para personas enfermas. E incluso en Tishá Be Av que coma y no dude. Inclusive un enfermo que se curó y que todavía no recuperó sus fuerzas, le es permitido comer y tomar, si teme que al no realizarlo le volverá la enfermedad.
4. Un anciano débil que sufre en su Ayuno, a pesar que se fortalece y camina como una persona sana, la Halajá para él es como la de un enfermo que no corre peligro, y está exento de ayunar en los cuatro (4) Ayunos. Y no debe preguntarle a un médico si puede ayunar, y le es prohibido ser estricto consigo mismo y ayunar.
5. El novio y la novia dentro de los siete (7) días de su casamiento, deben ayunar en los cuatro (4) Ayunos. Y asimismo los tres (3) encargados del pacto de Abraham (Brit Milá) que son el Mohel, el Sandak y el padre del bebé, deben ayunar en los cuatro (4) Ayunos si es que alguno de estos acontece en el día del Brit Milá. Y si el Ayuno acaece en Shabat, y se pasa para el día Domingo, tanto el novio y la novia, como los tres (3) encargados del Brit Milá, no completarán su Ayuno, sino que comerán y tomarán luego del (Jatzot haiom) mediodía, incluso en el Ayuno de Tishá Be Av que se pasa para el Domingo, por cuanto que es día festivo para ellos. E incluso que quisieran ser estrictos consigo mismos y ayunar en un Ayuno que se pasó al día Domingo, no les es permitido. (Y más aún le es prohibido al novio y a la novia dentro de los siete (7) días luego del casamiento, y al Mohel, al Sandak y al padre del bebé en día del Brit Milá ayunar un Ayuno particular por cuanto que es un día festivo para ellos, incluso un Ayuno de recordatorio de sus padres (Ior Tzait).
6. La norma para cuando cae un Pidión Haben en un día de Ayuno, que debe el padre del bebé ayunar en ese día, y sólo si es un Ayuno que se pasa al día Domingo, no completa su Ayuno, sino que come y bebe luego del (Jatzot haiom) mediodía. Lo mencionado rige solamente cuando la Mitzvá se cumple en su día, mas si se posterga la Mitzvá, por ejemplo que cayeran las treinta y un (31) noches desde el nacimiento del Bejor (primogénito) en Shabat, y se pasara el Pidión para el día Domingo, se debe realizar un Ayuno completo incluso en un Ayuno pasado al Domingo. Inclusive un Brit Milá que no se hace en su tiempo y fue fijado para un día de Ayuno que se postergó a Domingo, tanto el Mohel, como el Sandak y el padre del bebé deben ayunar todo el día.
7. A pesar que hay quienes opinan que Guedalia hijo de Ajikam fue asesinado en el día de Rosh Hashaná, y se pasó el Ayuno para el día siguiente de Rosh Hashaná, de todos modos por cuanto que se fijo el día 3 de Tishrei para el Ayuno de Guedaliá, el novio y la novia deben ayunar igual, sólo si el Ayuno de Guedalia acontece en Shabat y se posterga para el día Domingo, no deben completar el Ayuno, como se explicó anteriormente.
8. A todos los exentos de un Ayuno les es permitido comer en el día del Ayuno por la mañana, y ni siquiera deberán ayunar algunas horas. El novio y la novia y los encargados del Brit Milá que comen en el día de un Ayuno postergado comerán luego de Jatzot Haiom. Y más aún, no es necesario que todos los exentos del Ayuno coman menos de veintinueve gramos (29 gr.) en un tiempo mínimo. Lo correcto es que coman con discreción, ingiriendo alimentos verdaderamente necesarios. Y que no coman manjares para tener disfrute en la comida y la bebida. De todas maneras, a una persona enferma que necesita comer carne y otras comidas importantes para fortalecerse y curarse de su enfermedad, le es permitido comer estas comidas.
9. Todos los exentos de un Ayuno, no deben hacer una anulación de promesas antes de comer en el día de Ayuno. Asimismo no deben hacer ninguna expiación por cuanto que comieron y bebieron en un día de Ayuno. E incluso un enfermo que se curó después de esto, no está obligado a ayunar en otro día para completar el Ayuno, por cuanto que estos Ayunos decretados por nuestros Sabios no fueron sino destinados a gente sana que puede ayunar.
La norma respecto al consumo de remedios en un día de Ayuno, fue explicada en el capítulo 1, Halajá 13.
BIRCAT HAGOMEL –Bendición de agradecimiento-
Establecieron nuestros sabios, que la persona que atravesó una situación peligrosa debe agradecer al Eterno por su salvación pronunciando la bendición de “hagomel” delante de diez hombres judíos mayores, como aclararemos a continuación.
El Talmud (Berajot 54ª) afirma: Dijo Rabí Yehuda en nombre de Rab que cuatro personas deben agradecer al Eterno por su restablecimiento, pronunciando la bendición de “hagomel”. Aquel que atraviesa exitosamente el desierto o realiza un viaje transatlántico, el enfermo que se recupera y quien recobra su libertad tras haber estado preso. Sirve como memo didáctico, el versículo que reza: Y toda criatura te agradecerá eternamente, la palabra criatura, en el versículo “hahayim”, forman el acróstico de estas cuatro situaciones arriba mencionadas.
Y continúa el citado Talmud preguntando ¿Cuál es el texto de esta bendición? Y responde: Baruj Ata A-donay…..Hagomel Lehayabim tobot Sheguemalani Col Tob. Explica Maran, en su obra Bet Yosef esta texto de la siguiente manera: Incluso aquella “hayabim”, o sea rebeldes, como nosotros que carecemos de méritos, “guemalani col tob” nos recompensas con todo lo bueno.
Esta bendición debe ser pronunciada en presencia de diez adultos judíos, dos de los cuales deben ser eruditos de la Torá –Talmide Hajamim-. Como aprendemos del versículo: Y te enaltecerán en la congregación del pueblo, y en la residencia de los ancianos te alabarán. Congregación hace referencia a diez adultos (ver Pesajim 64) en tanto que ancianos se refiere a “talmide hajamim” –eruditos-. En caso de no contar con dos eruditos, no debe abstenerse de pronunciar esta bendición ya que esta condición no es imperativa. Sin embargo los diez adultos si son condición imperativa y de no contar con diez adultos no se podrá pronunciar esta bendición. Sí podrá ser pronunciada en el pensamiento.
Es apropiado previo a la bendición pronunciar el versículo: Ode A-donay bejol Lebab Besod Yesharim Beedá o sea, Agradeceré al Eterno con todo mi corazón, en el seno de los rectos de la congregación. Y todos los presentes responden “Amen” y la frase: El Eterno, que te ha dado todo lo bueno, te recompense con lo bueno por siempre.
LA DICTAMENES SOBRE DIVERSOS TEMAS HALAJICOS SEGUN LA OPINION DE:
MARAN HAGAON RABENU HARAV OVADIA YOSEF SHELIT''A
http://halachayomit.co.il/SpanishDefault.asp
El sitio HalachaYomit.co.il, fue creado el año 2005 y su objetivo principal es la difusión del conocimiento y los valores de la Torá, especialmente en distintos temas de la Halajá, poniendo especial énfasis en citar las fuentes y la forma de dictamen halájico. De esta manera, queda absolutamente claro que nuestra Torá es eterna y no existe complicación o interrogante halájico que no halle respuesta en los primeros escritos rabínicos, los posteriores e incluso los contemporáneos, de cuya sabiduría abrevamos nuestra sed de saber.
Gracias a D-os, en la actualidad este sitio cuenta con cerca de doce mil suscriptores que reciben diariamente su “halajá”, al margen de quienes eventualmente ingresan al sitio para consultar su biblioteca halájica.
Todas las halajot y/o dictámenes halájicos están redactados de acuerdo a la visión de nuestro maestro y gran exégeta de la generación Rabí Ovadiá Yosef, Shlit”a, quien es considerado una de las autoridades rabínicas más autorizadas y aceptadas de las últimas generaciones. Esto, de acuerdo al testimonio de los “geoním” y grandes maestros sefaraditas Rabí Ezra Atie z”l, Rabí Efraím Cohen z”l, Rabí Mordejai Sharabi z”l y muchos otros destacados rabinos.
Parte de las Halajot se obtienen de las distintas obras de Rab Ovadia Yosef, Shlit”a, y en aquellos lugares en los que no aparece su opinión sobre el tema, la Halajá la determinamos según lo que dictamina Marán –Rabbenu Yosef Caro z”l- en el Shuljan Aruj –código de leyes judías- y de acuerdo a la opinión rabínica mayoritaria, como acostumbra a hacerlo nuestro maestro Rabí Ovadiá Yosef, Shlit”a.
En numerosas ocasiones consultamos directamente a Rab Ovadia la forma en que debíamos dictaminar ciertos temas del sitio, y citamos la respuesta en su nombre.
Las Halajot de este sitio tratan los más diversos temas, desde las legislaciones que rigen al Shabbat hasta lo concerniente a las leyes monetarias, daños y perjuicios, etc. De tal forma que, las personas que se suscriban y lean permanentemente el sitio adquirirán, en un lapso relativamente corto, un conocimiento general de las leyes que rigen la vida cotidiana.
En estos momentos el sitio trata exclusivamente temas halájicos, sin embargo, nos proponemos en un futuro cercano extender la temática a la Parashá –porción semanal de la Torá- e incluso otros temas.
Las Halajot de este sitio están escritas por el nieto de Rabbenu Ovadiá Yosef, Shlit”a, Rab Ya´acob Sasson, Shlit”a, integrante del cuerpo de rabinos del centro de estudios Yehave Da´at.
El sitio en español es responsabilidad de Rabí Itzhak Fadda, Shlit”a, de Argentina, reconocido por su vasta trayectoria rabínica y sus trabajos de traducción en clásicos como Mesilat Yesharim, Derej Hashem, Emuná Ubitajon, etc,
REGISTRATE EN:
http://halachayomit.co.il/SpanishRegister.aspx
Torah, Halaja, Judaismo y màs en:
GRUPO EN FACEBOOK:
TORAH DESDE BARRANQUILLA
http://www.facebook.com/home.php?ref=home#/group.php?gid=62434215245
UNETÈ
Estudio de Torah y Halajá
En Barranquilla
Leyes Prácticas de Shabát y Yom Tov
Es un estudio esencial para aquellos que se aprestan al camino de giur.
Todos los Martes a las 7:00 PM, seguido de Arvit.
Guemarà Para Tod@s, Tratado de Berajot
Jueves: 7:00 PM
¿Cual es el origen de las bendiciones que recitamos en la avodah y porque estan redactadas de esa forma?
VEN Y ESTUDIEMOS!
No hay comentarios:
Publicar un comentario